Hace unas semanas visité el
antiguo poblado minero de El Centenillo. Me sorprendió el bello paisaje
circulando por la serpenteante carretera por la sierra, cerca de La Carolina,
pero situado en el término municipal de Baños de la Encina. Me acerqué hasta
este recóndito lugar de la provincia para conocer en su iglesia una imagen que
desde hace tiempo me despertaba una atracción especial. Un Cristo cautivo se
venera en una de sus capillas (pared del evangelio) que se trata, según se
contaba por las redes sociales, de nada más y nada menos que del titular
fundacional de la hermandad del Rescate de Linares. ¿Y cómo es que está allí?
Al parecer, cuando las turbas iconoclastas asaltaron la iglesia de Santa María
de Linares en aquel aciago día 21 de julio de 1936, no pudieron destruir la
imagen como se ha venido contando hasta fechas recientes. Pero al parecer había
otra historia que por esas cosas de las cofradías, se acaban olvidando,
ocultando y váyanse ustedes a saber. Lo cierto es que la imagen se tuvo que
salvaguardar ante la tensión que se respiraba en la sociedad antes del golpe de
estado del 18 de julio.
Gracias a las investigaciones de
Andrés Padilla Cerón, fue informado en El Centenillo de los avatares que pasó
la imagen para llegar a aquella iglesia. Al parecer, la salvaron escondiéndola
bajo tierra envuelta en un saco para salvaguardarla de las iras iconoclastas.
Acabada la contienda, como
ocurrió en muchos lugares, el pensamiento extendido era que la imagen se había
destruido. Fue tónica general, que muchos tardaran en informar y devolver lo que
habían guardado o rescatado hasta que la situación se fue normalizando, que
mientras tanto se encargó una nueva imagen a Gabino Amaya. Desconocemos si la
cofradía fue informada antes o después de la llegada de la nueva imagen, por lo
que la familia que lo salvó se quedó con aquella primitiva imagen
fundacional.
En los foros se contaba que acabó
allí por ser un lugar recóndito para que el olvido consiguiera que no
despertara el interés por recuperarla. Pero la realidad, es que aquella familia
tenía por residencia veraniega El Centenillo y en la década de los 90 del
pasado siglo, tras la buena sintonía que tenían con el párroco, decidieron
donarla a la iglesia para que recibiese allí culto público. Estando ya la
imagen en la pedanía, la iglesia encargó una restauración de la imagen en un
taller de Alcalá de Henares (Madrid), donde se le confeccionaron unas nuevas
manos. Es curioso que a muchos nos recordasen los grafismos del arte de Ortega
Bru. Tal vez el taller que las realizó fue el que tuvo sus hermanos y sobrinos
en la comunidad de Madrid. Desde entonces tomó la advocación de Jesús de la
Misericordia y es procesionada en el Viernes Santo de la pedanía.
Desde que conocí esta historia en
los ya desaparecidos foros de Semana Santa de Linares, la imagen me llamó
poderosamente la atención hasta que por fin la conocí en persona. Una imagen
realizada en la fundación, en 1897, costeada por sus hermanos como se refleja
en los estatutos. Probablemente realizada en Valencia como denotan los
grafismos artísticos de la imagen. Según la familia que lo salvó y guardó
recordaban que el autor era aragonés y que tal vez se realizó en Zaragoza.
Padilla Cerón intuye que podría haber salido de la gubia del escultor Carlos
Palao Ortubia (1857-1934), único imaginero aragonés que halló de la época y nos
aporta la noticia de una restauración, también anónima, sobre la imagen en 1928
en la prensa local de Linares.
Tanto en fotografías antiguas
como viéndolo actualmente, analizando sus ojos, el modelado de su nariz y la
barba me recordaban a las del Cristo de la Sentencia (Prendimiento) y sus imágenes
segundarias, obras todas ellas del valenciano Juan Bautista Palacios, o la
Virgen de los Dolores (así llamaban a la Virgen de Rosario en la prensa de la
época), según publicaciones de posguerra obra de Juan Estellés. Este artista
también sería el autor de la antigua Santa María Magdalena de la cofradía de la
Sentencia, que tras la guerra se convirtió en la Virgen de Gracia de la
cofradía de la Oración en el Huerto. Aunque tal vez esta imagen fuese de un
artista al que he estudiado en los últimos tiempos, José de Tena, fecundo en la
zona en los primeros años del siglo XX con trabajos en La Carolina y Bailén.
Incluso también me recuerda a los grafismos de los famosos sayones jerezanos de
la cofradía del Prendimiento, "Candilejas y Chupaceite", obras
coetáneas realizadas en Valencia. Pero el abanico de talleres de aquel círculo
artístico es tan amplio y de unas connotaciones tan similares (copias de
modelos), que adjudicarle un autor es ardua tarea a falta de
documentación.
Valga esta reseña y el reportaje
fotográfico para dejarles algunos "papeles viejos" inéditos que me
topé durante mis trabajos de investigación. Los documentos tratan sobre la
historia de la cofradía del Rescate de Linares y un periodo cuando esta imagen
era su titular. Aquella cofradía de la que se cuenta por costumbre en todo tipo
de publicaciones que la fundaron unos albañiles baezanos siguiendo los patrones
de la homónima cofradía de la ciudad renacentista. La información pertenece a
unas misivas conservadas en el Archivo Diocesano de Jaén, en la sección de
correspondencia del siglo XIX y XX (hasta los años 20).
El primer documento que mostramos
nos presenta serias dudas de que pertenezca a la cofradía del Rescate de Linares,
aunque con este título se le cite. Fechada el 11 de febrero de 1897, se
trataría del documento más antiguo de la cofradía, ya que sabemos que sus
estatutos fueron firmados el 5 de abril, recibidos y pasados al Fiscal
eclesiástico del obispado el mismo día y aprobados, parece ser, el 5 de mayo
(eso parece intuirse en la dificultosa comprensión de la palabra escrita a
mano) de aquel mismo año.
Leyendo lo escrito, nos hace
intuir que se refiere a una cofradía que no debería llevar pocas fechas
existiendo. La misiva está firmada en Jaén y todo hace indicar que responde a
una contestación del obispado a esta cofradía del Santísimo Cristo del Rescate.
Pensamos que en tan corto tiempo de existencia no podían surgir tan rápidamente
conflictos en la hermandad (además de no estar aún aprobada por el eclesiástico)
porque el texto versa sobre la actitud negativa del que fuera su presidente
(hermano mayor), un tal Francisco Rivas, el que es relegado del cargo y
obligado a entregar los bienes de la cofradía a la junta de gobierno. Aunque
esta misiva se encontraba en las cajas de las parroquias de Linares, pensamos
que puede tratarse de un error a la hora de su clasificación y se trate de otra
localidad, como, por ejemplo, la cofradía de Baeza, de la que la tradición oral
cuenta como hemos mencionado, fue el modelo seguido por unos albañiles baezanos
para fundar la hermandad linarense.
Sobre este aspecto vamos a confirmar
que correctamente, la cofradía fue fundada al menos por una familia de
albañiles afincados en Linares, pero naturales de Baeza. Además, podremos
confirmar que otros de sus hermanos fundadores también eran albañiles y podían tener
procedencia baezana.
Aunque en publicaciones locales
de sus primeras décadas y posguerra se ha podido escribir sobre este asunto, comenzaremos
haciendo mención al estudio científico que abordó en 1977 el investigador
jaenero Rafael Ortega y Sagrista en su Venerable antigüedad de las cofradías pasionistas
de Linares en el Boletín del Instituto de Estudios Giennenses. En el mismo,
estudiando los estatutos fundacionales que se conservan en el Archivo Histórico Diocesano
de Jaén, expone como hemos mencionado antes (consultado el mismo documento, pero
fotocopiado en el Archivo Municipal de Linares) que entre el 5 de abril y el 5
de mayo de 1897 se aprueban sus estatutos. Añade que los hermanos fundadores que
aparecen en el documento son Mateo Garrido Olaya como alférez vitalicio. Expone
que se sabe que eran albañiles procedentes de Baeza, pero no justifica cómo sabe
eso. Tal vez en aquella época se lo comentaron en Linares o encontró alguna publicación
que lo dijera, pero tristemente, nunca solía poner las fuentes consultadas. Hay publicaciones de temática cofradiera en Linares donde se cita esta curiosidad del oficio y naturaleza de los fundadores.
De la lectura de los estatutos remarca
los hermanos fundadores, que cita que eran “en número de once, figuran en
los Estatutos, entre ellos Andrés, Francisco, Eduardo y Bartolomé Ayala
Rodríguez; Francisco de Haro Guijarro, Ildefonso Gámez López, Francisco
Tobaruela y otros”.
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Algunas páginas de los Estatutos fundacionales. Fuente: Archivo Municipal de Linares. |
Consultando la fuente primaria,
vemos que extrajo estos datos del capitulo 3º: “Del Gobierno de la cofradía”.
En el capítulo se establece la configuración y elección de los cargos y deja constancia
de los nombres de los fundadores a los que añadimos a los que se dejó: Vicente Carrillo
Pestaña, Juan Agudo Real, Francisco Ortiz y Antonio Giménez.
Entre las rúbricas de los
estatutos no figura ningún Francisco Rivas por lo que acrecienta que el documento
que analizaremos a continuación probablemente pertenezca a la cofradía baezana,
única de esta advocación hasta esa época en la provincia si no nos falla la
memoria.
Las rúbricas son las siguientes: el
Alférez: Mateo Garrido Olaya, el hermano mayor interino: Francisco de Haro, y
como hermanos fundadores firman: Francisco de Haro nuevamente, Ildefonso Gámez López,
Francisco Tobaruela, Andrés Ayala, Juan Agudo Real, Rafael Ureña lo hace a
pedimento de Eduardo y Francisco Ayala (no sabían firmar), Manuel de Ayala lo
hace en su nombre y en el de Bartolomé Ayala (tampoco sabía firmar) y
finalmente Francisco Ortiz, Antonio Jiménez y Vicente Carrillo, además del
párroco Eufrasio López Jimena (curiosamente natural de Baeza). Pareciese que la
idea surgiera de un núcleo familiar apellidado Ayala y por ello nos pusimos
manos a la obra a buscar a estas personas en los padrones de vecinos de Linares
del Archivo Municipal de Linares en 1897 para corroborar si eran albañiles y de
Baeza. Les puedo confirmar, que sí, que los que hemos encontrado eran la mayoría
albañiles y que los hermanos Ayala pudieron ser el eje fundador de la cofradía,
al ser todos hermanos, albañiles y naturales de Baeza.
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Página donde aparece la familia de Andrés Ayala Rodriguez. Fuente: Archivo Municipal de Linares. |
Eduardo Ayala Rodríguez vivía en la calle Sixto Cámara (actual Fernando III el Santo), tenía 41 años, era natural de Baeza y de profesión albañil. Llevaba en Linares 26 años. Estaba casado con María Porlán Belmonte, de Beas de Segura y tenían una hija: Eulogia de 15 años, nacida en Linares. Se anota que Eduardo no sabía escribir, por lo que firmó en su nombre Rafael Ureña.
Francisco Ayala Rodríguez vivía en
la calle Arrayanes (actual Julio Burell), en el nº 15, tenía 40 años, era
natural de Baeza y de profesión albañil, llevando establecido en Linares 22
años. Estaba casado con Jacinta Parras Cuchillo, de ¿34? Años, natural de Argamasilla
(Ciudad Real) y tenían dos hijas: Remedios y Mª Carmen de 9 y 4 años
respectivamente. Se anota que Francisco no sabía escribir, por lo que firmó en
su nombre Rafael Ureña.
Andrés Ayala Rodríguez vivía en 1897 en la calle Corredera de San Marcos, nº 83, tenía 36 años, era de Baeza y llevaba en Linares 25 años, casado con Josefa Agudo ¿Micón?, de 30 años, natural de Tobaruela y padres de Juan, de 11 años, nacido en Linares. Se anota que Andrés sabía escribir por lo que firmó los estatutos.
Manuel Ayala Rodríguez firma en
su nombre y el de Bartolomé Alaya (del que no se especifica un segundo
apellido). Manuel vivía en la calle Cervantes nº 9, de 30 años, natural de Baeza,
pero de profesión jornalero y llevaba en Linares 20 años. Estaba casado con
Sacramentos Moreno Guillén, de 20 años, natural de Bolaños (Ciudad Real) y tenían
dos hijos: Encarnación (8 años) y Enrique (1 año).
No hemos encontrado a Bartolomé Ayala como hermano de los citados, pero al no exponerse en los estatutos el segundo
apellido, pensamos que se puede tratar de Bartolomé Ayala García, de 27 años,
natural de Baeza y de profesión jornalero. Casado con Dolores Martínez Rodríguez
de 18 años y natural de Ibros, sin hijos. Vivían en la calle Cervantes nº 13. Pensamos
que podrían ser primos. Se anota que no sabía escribir, razón para que firmase
en su nombre Manuel Ayala. En la calle Isaac Peral hemos encontrado en el nº 3
a sus posibles padres, Miguel Ayala Molina, de 60 años, carpintero de Baeza que
estaba casado con Juana García Bajo, de 60 años. Tenían dos hijas más: Carmen y
Mariana Ayala García, de 26 y 22 años respectivamente, solteras y naturales de Baeza.
En el padrón hemos encontrado que
prácticamente todos los Ayala de Linares eran baezanos, como José Ayala Cruz,
de 44 años, natural de Baeza y de profesión jornalero. En la calle Espronceda nº
19 vivían Ricardo Ayala de la Oz (30 años) y su madre María de las Nieves Oz (60
años) como naturales de Baeza con el matrimonio formado por su hermana María de
las Nieves Ayala de la Oz (33 años) y Antonio ¿Yª? Gallego, de 38 años, natural
del Pedroso (Sevilla), de oficio carpintero.
No hemos encontrado a Francisco Tobaruela,
pero si a un Gregorio Martínez Tobaruela en la calle Alonso Poves, nº 16, de 39
años, de Linares y de profesión albañil.
Vicente Carrillo Pestaña, vivía en
la calle Cambroneras nº 7. Tenía 30 años, albañil, pero natural de Jaén. Pero su
mujer, Natividad […], de 27 años era de Baeza, por lo que pudieron llegar a Linares
desde la ciudad de la esposa. Tenían dos hijos: Diego (3 años) y Marcelina (1
año). Vicente se anota que sabía escribir.
No hemos encontrado al Rafael
Ureña que firma en nombre de Eduardo y Francisco Ayala, pero si a un Felipe
Ureña Montoro que vivía en la calle Romea. Tenía 40 años y era natural de Baeza
y de profesión albañil. Podría ser su hermano, por lo que serían otra familia
de albañiles. De hecho, en la calle Daoiz, nº 2, vivía un tal Pedro Amores Carrión,
natural de Baeza y albañil. Tenía 48 años y estaba casado con María Contreras de
la Rosa (37 años, Martos). Este hombre tuvo que estar casado en primeras
nupcias con una Ureña, porque sus cuatro hijos llevan de segundo apellido
Ureña, siendo Luis (18 años) y Antonio Amores Ureña (14 años) naturales de Baeza
y albañiles.
El alférez fundador, D. Mateo Garrido Olaya, fue el abuelo materno del beato linarense Manuel Lozano Garrido "Lolo". Tanto su abuelo como su abuela (Expectación Garrido Sanchez), aunque eran naturales de Linares, estuvieron afincados en Bailén sobre los años cercanos a 1888 en que nació su hija y mandre de Lolo, Dª. Lucia Garrido Garrido. En el acta de nacimiento, Mateo Garrido figura como propietario y fue fecundo en el prestamismo en Bailén en aquellos años hasta su mudanza a Linares.
Creo que estos datos son más que
suficientes para certificar que una especie de asociación del gremio de la albañilería
linarense con orígenes baezanos fueron los fundadores de la hermandad del Rescate,
sobre todo por los Ayala, dejando de ser una tradición oral para ser un hecho verídico
tras un estudio científico. Tal vez fueran devotos del Rescate baezano, aunque
como vemos, se afincaron desde muy jóvenes en Linares. Quizás, que el párroco D.
Eufrasio López de Jimena (calle Alonso Poves, 39 años) fuese de Baeza les sirviese
de aliciente para crear una nueva cofradía siguiendo los patrones de la de su
pueblo.
Tras este novedoso análisis que
esclarece el origen de la cofradía del Rescate de Linares adjuntamos la
transcripción del documento de Francisco Rivas:
“Don Francisco Rivas:
mayordomo
Jaén y febrero 11 de 1897
En atención a las justas
quejas que nos han expuesto los piadosos cofrades del Santísimo Cristo del
Rescate, y vistos la actitud hostil y desobediencia con que se ha
producido, Don
Francisco Rivas, mayordomo que fue anteriormente de la cofradía ya citada por el
presente, venimos en confirmar y confirmamos la expresión hecha por ello del
Presidente de referido Sr. Rivas y quede este privado de toda clase de derechos
en la misma y le mandamos, por este nuestro auto, entregue al actual mayordomo
de la repetida cofradía del Santísimo Cristo del Rescate cuantos objetos y
enseres pertenezcan a la misma, autorizando cuanto ha lugar en derecho al Sr.
Arcipreste de la ciudad y partido de Baeza y al Presidente de ella Don Juan José Marín, para que en nuestro
nombre y en caso de negativa del ya ha expresado Don Francisco Rivas reclamen a
los efectos indicados el auxilio de la autoridad civil en la manera y forma que
a mi juicio crean más
convenientes, así
lo decretó,
mandó
y firmó
su señoría Ilma. el Vicario
Capitular de este Obispado de que certifico”.
Según Andrés Padilla Cerón la
hermandad tuvo que procesionar por primera vez para el Jueves Santo de 1898. El siguiente
documento tratará sobre su procesión del año 1901. En marzo de aquel año
y programando la inminente salida procesional, la nueva hermandad quería pasar
por unas calles cofradieras por antonomasia en aquellos tiempos: la calle
Santiago para volver por la de Baños. Por ello solicitaron permiso al obispado,
bajo recomendación del párroco para que el prelado decidiera si les concedían
hacer estos cambios ya que el párroco aludió que en los estatutos aprobados por
la autoridad eclesiástica ya figuraba un recorrido, y que, para hacer ese
cambio, y por consiguiente, alterar lo establecido en los estatutos, debían
solicitar ese cambio al Palacio Episcopal. El hermano mayor era Carmelo Cuevas
y curiosamente, desde el obispado se equivocaron de parroquia a la hora de
pedir el acostumbrado informe sobre el caso al párroco de San Francisco,
Francisco Cobo, el que contestó sobre la situación, pero aclarando que la
cofradía no estaba en su parroquia.
Esta es la transcripción del
expediente:
“E.Y. Señor Obispo de Jaén.
Muy señor nuestro;
celebrada junta general bajo la presidencia del señor cura párroco pidió toda
la junta que se ampliara la estación de la procesión las calles de Santiago y
calle de Baños además de su carrera por ser dos calles que la andan todas las procesiones
y la de N.P.J. del Rescate no la anda.
Y contestó el señor cura
párroco que como estaban aprobado los estatutos por S.Y. con la carrera que
tenía que andar que no podía ampliar la procesión sin su permiso y en
vista de esto le pedimos a S.Y. nos conceda que vayamos por esas dos calles
para ser igual a todos.
Espero me conteste a lo más
pronto posible para en la junta del día quince poner en conocimientos de los
hermanos su opinión y no teniendo otra cosa que pedirle.
El hermano mayor en nombre
de la junta general
Carmelo Cuevas [rúbrica]
***
9 de marzo de 1901
Pase la presente instancia
al sr. Cura párroco de S. Francisco de Linares para que sirva informar acerca
de su contenido cuanto se le ofrezca y aparezca.
Lo acordó S. Excma.
Reverendísima el obispo mi señor de que certifico
Raimundo Victorero [rúbrica]
***
Informe: Cumpliendo con lo
mandado por el Excmo. e Ilmo. Sor. Obispo de esta diócesis en su decreto
precedente, debo decir que no veo inconveniente alguno en que se acceda a la
gracia que solicitan los hermanos de la cofradía de NP. Jesús del Rescate que corresponde
a la parroquia de Santa María de estos.
V.S.Y dispondrá desde su
reconocida ilustración e imparcialidad si así lo cree conveniente lo que juzgue
más acertado. Y para que conste doy el presente que firmo y sello con el escudo
de esta parroquia, en Linares, el día diez de marzo de mil novecientos uno.
Francisco Cobo [rúbrica]
[Sello de la parroquia de San
Francisco]”
Las siguientes comunicaciones
están fechadas en 1904 y vuelven a aparecer los Ayala. La primera es una simple
invitación por parte de la cofradía al señor obispo D. Salvador Castellote y
Pinazo para que asista a la procesión del Jueves Santo que salía a las 7 de la
mañana en una procesión matinal como aún sigue siendo costumbre en la hermandad
de Baeza. Es confusa la fecha de contestación desde Jaén agradeciendo la
invitación pero que probablemente no correspondería. Este es el texto:
“Excmo. Sr. D. Salvador
obispo de Jaén: La cofradía de N.P.J del Rescate en cumplimiento del artículo
9º de sus estatutos celebrará procesión solemne el día de Jueves Santo para
cuyo acto invita a su excelencia como presidente de la misma, a las 7 de su mañana
de dicho día.
Linares 20 de marzo de 1904
Jaén 16 ¿mayo? 1904
Agradecida la invitación
El obispo [rúbrica]”
En la otra comunicación nos
confirma el nombramiento del rey Alfonso XIII como hermano mayor (presidente)
honorario y la concesión del título de Real para la cofradía. La carta
está fechada dos días después de la concesión real que acaeció el 14 de junio
de 1904. La comunicación, enviada por Andrés Ayala, hermano mayor de la cofradía
era solamente informativa por lo que la contestación episcopal se limita a que
se archivase la misma. Aunque la experiencia me dice que este es un documento
suelto en alguna historia más amplia que desconocemos.
Esta es la transcripción:
“Excmo. Ilustrísimo Señor
Obispo de Jaén.
Ilustrísimo Señor la junta
directiva de la cofradía de N.P.J. del Rescate le participa a su Ilustrísima,
que S.M: el Rey (q.D.g) ha tenido la bondad de contestarnos por medio de un
oficio admitiendo el cargo de presidente de honor y al mismo tiempo hacer Real
a esta cofradía lo que le comunico a su ilustrísima como presidente de la
misma.
Linares a 18 de junio de
1904.
El hermano mayor
Andrés Ayala [rúbrica]
Jaén 21 de junio de 1904.
Enterado: únase a […] antecedentes
y archívese.
El obispo de Jaén [rúbrica]”
Fuentes:
ORTEGA SAGRISTA, R. (1977): Venerable
antigüedad de las Cofradías Pasionistas de Linares. Boletín del Instituto de
Estudios Giennenses, nº. 92, 1977, pp. 31-86
PADILLA CERÓN, A. (2011):
Presencia de la Orden Trinitaria en Linares: El hospicio y la cofradía de
Jesús del Rescate. Trinitarium: revista de historia y espiritualidad
trinitaria, nº 20, pp. 243-292.
Archivo Histórico Diocesano de Jaén,
Sección Correspondencia, legajo C.O. 72 Larva (1836-1921) Linares (1848-1899) y
C.O. 73 Linares (1900-1923) Lopera (1852-1879), s/f.
Archivo Municipal de Linares,
Sección cofradías, legajo 2572-013, s/f. "Estatutos de la cofradía de
Ntro. Padre Jesús del Rescate de Linares, 1897".
Archivo Municipal de Linares, Sección Padrones Vecinales; leg. 522/4, 524/1, 523/4, 523/3, 523/2.
http://descubrirlinares.blogspot.com/2014/03/jesus-del-rescate.html
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