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viernes, 29 de noviembre de 2013

SEVILLA EN LA MEMORIA EN UN NUEVO LIBRO.

Recientemente ha salido al mercado una nueva publicación escrita en torno a los aspectos que conforman la Semana Santa de Sevilla. Un libro que nos vuelve a hablar de la historia y como fue la Semana Santa más mediática del mundo, en un periodo transcendental para conocer la actual suntuosidad de las cofradías hispalenses. El siglo XIX, es el protagonista en esta ocasión en este estudio, que más bien viene a resumir cientos y cientos de estudios sobre este siglo desperdigados en diversas publicaciones de temática cofradiera, la verdad no me estoy encontrado mucho más nuevo que yo no haya leído ya, pero que obviamente se lo recomiendo a todo aquel que quiera conocer los avatares cofradieros de este siglo más cómodamente en una sola obra, que por un lado fue duro y desgraciado con las cofradías hispalenses y por otro le dio el impulso definitivo a unas instituciones de fieles como para convertir la Semana Santa en la celebración más grande y admirada de los sevillanos tanto en su idiosincrasia como fuera de ella, ya que podríamos decir que fue cuando a la Semana Santa se le dio también un impulso turístico y por consiguiente, y espero que no se confunda nadie, de espectáculo, algo que atrajo al turismo y con él, al dinero, y con ello el principio de un pensamiento para equiparar todas las cofradías a grandes patrimonios artísticos en lo que se refiere a sus pasos y bordados que realzarían perfectamente las grandes obras de imaginería que el pasado, y sobre todo el barroco, legó a la ciudad.

El libro, titulado “La Semana Santa de Sevilla en el siglo XIX” es obra del abogado sevillano Rafael Jiménez Sampedro, que para los amantes de la lectura cofradiera como es mi caso, nos suena más por ser el director de la revista que edita cada mes el Consejo de Hermandades y Cofradías de la ciudad de Sevilla, “El Boletín de las Cofradías de Sevilla”, del que este que les habla es suscriptor desde hace unos años. El mismo se le puede considerar uno de los grandes investigadores de los últimos tiempos en Sevilla, aunque no sea historiador y sea respetado por los mismos, incluso de la lectura de sus trabajos este que les habla cree que ha aprendido muchísimo. El libro ha sido editado por una editorial que últimamente está apostando fuerte por libros de temática cofradiera, y muy buenos por cierto, “Abec editores”.
Aunque como ya podrán estar imaginándose no soy yo de venir dando demasiada publicidad a nada, el objetivo de esta entrada es el de volver a mostrar… dejémoslo en una nueva satisfacción. Lo lógico, es que en este libro se insertaran fotografías fechadas en el siglo de los románticos por antonomasia, porque además la fotografía ya existía para ello, como ejemplo nos lega en el mismo trabajo, la que se puede considerar la fotografía más antigua de un paso sevillano en la calle, siendo el protagonista Ntro. Padre Jesús del Gran Poder, tal como se consideró en las prestigiosas páginas que el mismo escritor del libro dirige en el Boletín de la Cofradías, que como anécdota, en su día escaneé para pasársela a un amigo que necesitaba una fotografía en concreto que nos mostrara la vida social en España en el siglo XIX para un master que está desarrollando, porque las costumbres y fiestas estaban incluidas… mi amigo pues se puede decir que se coronó con el documento, pero yo le indiqué todos los datos de donde estaba sacada la foto, publicación, posible dueño e incluso el nombre de quien escribió el artículo en el Boletín de las Cofradías de Sevilla así como el número, mes y año de publicación.
Con esto, pues me alegro de hojear el libro, vamos ya está casi leído, y me encuentro una fotografía que lo puedo decir bien claro, me pertenece. Como ya se podrán imaginar volvemos a aquella serie que algunos les aburrió y a otros les encandiló que titule “Sevilla en la Memoria” donde lance a través de la red la publicación por primera vez de unas fotografías inéditas de la Semana Santa hispalense en pasadas décadas. Ciertamente como son mías y las publiqué para que el mundo las disfrutara, como así me consta, pues me enorgullece que poco a poco, sentir que estoy dejando mi granito de arena en este grandioso mundo de la Semana Santa. La foto en concreto se publicó el día 16 de abril de 2011, en una entrada dedicada a la hermandad del Amor, siendo cogida la fotografía perteneciente al paso de la Entrada en Jerusalén, “La Borriquita”, donde nos muestra al Dios de los niños sobre su actual paso en el interior del Salvador o la Catedral, la verdad no puedo asegurarlo, pero dentro de un templo seguro. Incluso nos muestra la antigua disposición del misterio que el próximo Domingo de Ramos, (D.M) la hermandad pretende recuperar. Quizás por que las imágenes o el paso presentara una imagen más similar a la del siglo anterior ha sido la elegida para figurar en este libro dedicado al siglo de los cardos y las hojas de acanto, pero lo cierto es que fotografías mucho más afines a aquella antigua estética existen y muy conocidas por la gran mayoría. No sé, se habrá querido aportar material de nuevo descubrimiento para darle quizás más valor a la obra, pero como digo para mí es un honor, aunque no se diga en ningún sitio –y eso que la publicación trae notas a pie de página y bibliografía por un tubo- quien tuvo la molestia de darlas a conocer al universo cofradiero y en qué lugar. Aunque no dudo, que la fotografía se encontrase en redes sociales o foros, porque yo mismo mes las encuentro, en algunos casos nombrando procedencia y en otros no, pero no pasa nada, yo mismo soy en muchas ocasiones lo suficientemente vago como para no hacerlo. He aquí nuevamente mi lamento de que tenía que haberlas mostrado con una marca de agua.

Pero si se cogió de aquí, porque no hay duda que es la misma fotografía –observar el escaneado de las grapas de los picos de la fotografía-se hubiesen llevado una copia de muchísima más calidad y tamaño, que por esto mismo tuve que colgar copias más reducidas en tamaño y calidad, como así obré con las hermandades de la Lanzada y la Exaltación cuando gustosamente me las pidieron para publicarlas en sus respectivos boletines. Pues con todo eso, porque uno no hace las cosas para que lo alaben ni lo suban a los altares, pero tal como aprendo de ellos mismos, hay que darle al césar lo que es del césar y que quede constancia que mi pequeñito grano de arena es este nuestro maravilloso mundo de la religiosidad popular ha quedado impregnado en una publicación que seguirá formando a las generaciones venideras.

*Entra en la página de Facebook o Twitter del Simplemente Capillita y podrás ser avisado de nuevas actualizaciones e incluso vivir más experiencias y anécdotas del mundo de la Semana Santa que no se refleja en el blog.

miércoles, 27 de noviembre de 2013

...Y ENCONTRAMOS EL AMPARO. (y III)

Y continuamos con la gloria que abrió el luctuoso noviembre, la gloria de negro y me empuja a hacerlo, el pasado viernes, el mismísimo Curro, y es que día tan bueno solo podría acaparar mis consabidos tochos. Volvíamos de la agenda cofradiera en busca de la que repartía su Amparo por el barrio de San Francisco, pero no nos perdimos mucho aunque por el Socorro ecos de Valle nos hubieran trasportado a la jornada grandiosa de la Victoria casi justamente un mes antes. El Amparo ya había traspasado la cordobesísima Corredera y se encontraba en el segundo saludo o parada del itinerario. Ciertamente este es el momento que quizás menos me embriaga de esta procesión, no sé por qué, quizás porque en esa plazuela hay un bar siempre atestado de gente, por lo menos siempre en estos tres últimos 1 de noviembre y quizás esa muchedumbre, envueltos en el extasiante ocio del deguste de la rubia o los ricos caldos escoceses,  caribeños o según el gusto, parece que le resta encanto aunque allí estuviese la gloria plateada, bella rosa hecha clavel caminante al compás de “Soleá Dame la Mano”. Pero la Virgen pasa del lugar con menos encanto según mi percepción donde se la pueda ver, al quizás gran plato fuerte de la noche cuando la estrechuras y las bullas, este año más que nunca, dibujan la perfecta figura de la gracia, porque aunque estuviésemos en tiempo de gloria, los evocadores ecos de la pasión emergieron por todos los recovecos de las angosta calle.
La música deshojó lo mejor de sí, que nos llevó a abrir bien los oídos, a entornar los ojos como búhos, a respirar y casi fumar el aroma de la gloria, el incienso –últimamente no puedo quitarme el “mono” de pegarle una “calaita”- y abrir los sentidos de ver como María nos amparaba siempre sobre los pies, siempre de frente, con el compás medido y cangregeando que parecía que estábamos en la gran Semana de Dios… la cabaretera francesa cambió por una noche el encanto de Híspalis y se asomó a las esquinas de Córdoba, en esa doble o media revirá, comenzó a sonar la ópera-marcha, y se hizo el silencio y las expectación, el Amparo se convertía en la protagonista en segundo plano de la historia de amor más cofradiera de todos los tiempos, “Margot” emergía de los instrumentos, y todos sentimos ese son de otro tiempo, que calzaba también perfectamente con el paisaje cordobés, de hecho la buena música cofradiera en cierta parte le debe mucho a Córdoba. Música tan mustia y rancia que abrió la senda de la gloria, casi sin poder avanzar, para los que dicen que las glorias así les “huele a Semana Santa”… mira que cosa más mala, que la Virgen casi no podía caminar…


Y es que la música que siguió podría resumir todos estos éxitos, de querer procesionar a Dios y a su Madre Bendita como las “Procesión de Semana Santa en Sevilla”, la inconfundible partitura del maestro Marquina volvió a emocionarnos, y ya al amigo Pradas que contarles… clasicismo, genialidad… que me quedé con las ganas en el foro de Andújar de hablar de las glorias y hablar de esta tan especial gloria, que con el sabor luctuoso nos despertó y reivindicó una gran verdad, y es que los cofrades y capillitas disfrutamos y nos alegramos de la gracia, aunque en lo alto un paso vaya Dios humillado, dolorido he incluso muerto… ¿por qué no, cuando la Virgen llevase al niño Dios dormidito?… la verdad, me hubiese gustado ver que música llevarían las glorias sevillanas a finales del XIX y principios del XX.

En el video se puede escuchar a Federico decirle a alguien que guardase pilas para la vuelta… no sé si fue a Pradas que grabó esta chicotá con la marcha del maestro Marquina, la verdad ya no recuerdo si hubo alguna chicotá más antes de la vuelta o revirá en la calle Armas con San Francisco, la estrechura más imponente que he visto yo por donde pasa un paso, de hecho, es la Virgen del Amparo la única, o eso creo, paso que transcurre por ahí y gracias también al ornamento o disposición piramidal de su paso, ahí no podría sobresalir un candelabro y mucho menos pasar un palio… si hasta tienen que girar el farol de la calle que le da más sabor y embrujo al enclave, aunque en un balcón se asomaran unos “flipaos” orientales, o chinos como siempre hemos dicho en España, y descolocaran un poco la perfecta estampa de una procesión en Andalucía, de las rancias, de las de toda la vida aunque no lleve ni diez años en el espíritu cofradiero, aunque quizás ya nadie niegue que es quizás la gloria con más sabor de toda la ciudad de la Mezquita. Hasta allí, en el poco bordillo que existe nos colocamos mientras pasaba la gran bulla de cangrejeros que se formó delante del paso y éste que les habla se esperaba como en los dos últimos años que sonara en una eterna revirá “Saeta Sevillana” de Gámez Laserna, pero no sonó la música de este jiennense al que Córdoba le dio mucho y él se llevó mucha esencia de su música, como para crear en Sevilla genialidades como esta.






Se levantaba las andas del Amparo y sonaba una genialidad de un cordobés, que hace poco se marchó al amparo de la que no es imagen y sobran las imaginaciones y la experiencias místicas para ver que en frente tienes a la Madre de Dios y es la que te habla y consuela como a todos los seres humanos nos gustaría. José de la Vega ya gozará de esto, a nosotros solo nos quedan las cofradías para poder acariciarlo, o quizás quien sabe, los que aquí amaron nuestro mundo están allí tirándose de los pelos por volver a disfrutar cosas como lo que comenzó… la mejor obra de De la Vega marcó el compás que cuando Guerrero y yo la intuimos se nos puso los pelos como escarpias… dice mi amigo que cada vez que la escucha le gusta más, a mí me pasa lo mismo –y eso que durante muchos años no me convencía-, he incluso la nombró mucho durante el día.
Federico nos tenía guardado el secreto cuando en la apretada esquina comenzamos a sentir el amparo, y ese sentimiento de la calle Laraña de Sevilla que en la capilla del Socorro nos perdimos, volvieron ecos de Valle…. Sonó “Valle de Sevilla” y volvió la magia, la chispa, el pellizco, se volvió a cerrar la burbuja, sobraba el mundo entero y si conseguías despegar la mirada de los ojos de la Virgen veías igualdad, no sentías que nadie era más que tú ni que uno era más que nadie, ni siquiera podías fijarte como Curro, Fede o incluso David Arce mandaban tan estrechísimo giro, era como estar paseando por un valle celestial con la Virgen María, sintiendo solo felicidad y paz y la inexplicable ciencia de la música cerrando el momento más perfecto…


Me decían que mi blog desprende mucho sentimiento, lo intento, pero más quisiera yo poder escribir lo que se sintió allí, donde todo tenía un sabor insustituible, el del incienso. Cuando se obró nuevamente el milagro, porque les aseguro que cuando te plantas en la esquina sin nada, no puedes concebir que por ahí pase un paso, y la parihuela de la Candelaria tienes las medidas de un palio de verdad… explotó la burbuja con el golpe de percusión, se abrió el compás, el mundo volvió a respirar, y Federico vino a resumir perfectamente el momento… le van a tener que poner –a la calle Armas- “calle Amparista”. Sin duda, porque se palpa que es el momento mágico, pero aún quedaba la recogía, y perdonen que me salte algunas chicotás, pero es que ya no lo recuerdo ni hay videos que me refresquen la memoria, pero en el arco de San Francisco se mascaba el final del sueño. “Macarena” de Cebrián hacia intuir a los hermanos del Huerto, quizás, el compás de un Domingo de Ramos que toca a su fin, mientras su impresionantes bambalinas rozan las piedras mudas y testigos de tantos años de sueños. Y la noche dibujaba las más bellas estampas entre las sombras de las piedras de la fachada del templo, mientras su manto “bordado en la madera” parecía que nos decía adiós, pero que ahí iba a estar todo un año recibiendo al que necesitara su amparo. Negro sobre negro… sin desvanecer, que me volvió a tocar el alma cuando el giro completo se hizo al compás de una marcha que cuando la escucho solo me trae una sensación a la mente: “la Virgen llorando”. Eso es lo que pienso cada vez que escucho la más inmortal partitura del maestro Dorado, que aunque no llorara esta hija de Santa Ana, seguía siendo, incluso en latín “Mater Mea”, la mía y la de todos. Quiso la Virgen que llamara a mi casa y mi padre estuviese disponible para que se empapara a través del móvil del directo de una de sus marchas más predilectas, pudo sentir el escalofrío que se produce cuando el cuerpo de trompetas contesta en la machacante y agónica melodía, pero no pudo sentir el compás de la Virgen, porque esos momentos, tal como diría Curro, de arte efímero, solo los pudo saborear los que tuvimos la dicha de estar allí presentes. Así la Virgen cerraba la gracia y la grandeza de los que nos gusta una procesión más que a rascarnos un grano, pero ojo, no nos equivoquemos, unas procesiones con unos ingredientes esenciales y si quieren saber que supermercados los vende, pregunte por una ciudad que corona un Giraldillo…









Con la Virgen bajo la techumbre y pisando suelo sagrado en honor del santo que da nombra a nuestro actual Papa, en la oscuridad del templo, aún quedaba más hueco para las emociones. Curro levantaba la Virgen por el párroco de la iglesia, palabras con verdad, no para caer bien, porque en Andújar le comente algo de aquel cura, que ahora les contaré y solo tuvo palabras de elogio para este cura… será la juventud, menos mal que la iglesia española o andaluza del futuro creo que cree ciegamente en nosotros… menos mal.
Y Pradas y Guerrero casi lloran, se emocionan con lo que sonó, que por cierto sonó porque a don Joaquín, este sacerdote del que les hablo, también le emociona. Marcha que me trae recuerdos de mi niñez y quizás de momentos amargos pero que también me trajeron la gracia. Es más, pienso que no está a la altura de tantas y tantas marchas fúnebres que sonaron en la tarde, anteriores casi todas a esta. No sé, no le encuentro en sus partituras la riqueza de otras, incluso melodías muy planas, pero que no me cabe duda, desde su concepción levanta el pellizco de quien la escucha. Su estreno hizo que una cuadrilla entera se saliese de un paso, que quizás ya mandaba la familia maestra de Curro, a preguntarle a Abel Moreno que qué era aquello que había sonado… Pradas es “Abelmoriano” a muerte, yo le digo que tiene que viajar un poco más en el tiempo, pero en las penumbras de San Francisco, vimos alejarse tal como diría Manolo Santiago; “gota a gota” a la Virgen del Amparo con una historia hecha música, una historia que nos muestra como es en Sevilla… “La Madrugá”. Solo puedo decir, que allí, pegado a los clarinetes, escuchando el éxtasis final de la marcha… ¿señores como les describo el sentimiento…? solo sé, que muchas gracias a los que grabaron aquella chicotá que me hizo sentir “que es la hora y no es la hora”…


Curro y Fede nos invitaron a la casa de hermandad, donde como hacen casi todas las hermandades que trabajan de estas maneras, acaban tras estos intensos momentos, degustando un bocata y las mejores charlas, las que se hacen con el trabajo cumplido, y qué trabajo… me llamó la atención algo en Curro que muy pocos capataces tienen, y es que tiene un gusto u dominio de la música procesional impresionante, y que algunas discusiones, en plan broma habrá tenido con su gente, que el referido cura vino dándole las gracias por que sonaran “La Madrugá” en la chicotá que le dedicó, pero que le hubiese gustado también… “Caridad del Guadalquivir”. Quien entienda de música entenderá este detalle… el capataz con una sonrisa en la boca, mascándose el buen rollo con el cura, solo pudo decir que “eso aquí no va a sonar”… buen costalero, buen capataz, buen gusto en arte, priostía y un genio elaborando repertorios… como diría Pepe Carvajal… “un multiusos”, los que luego todo lo que tocan lo convierten en oro. En este punto me gustaría comentar algo que estos dos capataces y amigos me lanzaron, algo que me llenó de orgullo y sorpresa, porque me fui a lo más gordo y siguieron sin encontrar problema alguno, desde entonces no paro de pensar en ello, en Andújar, Curro me volvió a comentar que no era ninguna broma, y Curro tiene fama de que su palabra va a misa… pero por el momento creo que es mejor ser cauto y callar, lo que Dios y la Virgen quiera es lo que pasará, aunque me dijo que el detalle que me ocurrió en la mañana de este día, por rincones jesuitas, también le gustó y cree que tampoco fue casualidad…
Curioso que sobre las once de la noche quede con mis amigos, los no cofrades, en el pueblo para echar una jornada más de fin de semana… pero a esa hora estábamos en la taberna de la costalería cordobesa, atestada del mundo de abajo, de los grandes recuerdos de la vida de Curro, casi un templo donde se venera, tal como les dijo cierto día Antonio Santiago, a su padre, a Manolo Santiago. Allí disfruté, pero vaya grandes sensaciones se llevaron mis dos amigos y paisanos, mientras las conversaciones con Fede y la gente de sus cuadrillas, sus amigos, nos hicieron saborear las grandezas de nuestro tiempo mejor… al final nos fuimos de allí a las dos de la mañana, mis amigos no cofrades ya están acostumbrados… yo miro al Dios del cabecero de mi cama y le pregunto: ¿ahora qué?... creo que tiene cara de que vuelva…
Y para rematar la faena, Pradas tenía tal frio que nos pidió que no buscáramos el Campo de la Verdad, donde tenía aparcado mi vehículo, por la vera del rio, para intentar desquitarse lo máximamente posible del frio que podría levantar la humedad del legendario Betis. Por ello buscamos el puente romano por Cardenal González, que emerge a la Mezquita-Catedral y de ahí al Triunfo de San Rafael. Pues bien, en la mañana Pedro Guerrero le preguntó a Fede que como fue ponerle a la Virgen “Amparo” de advocación y el mismo nos dijo que la verdad no fue nada nuevo, sino que los conocedores de la historia les comentaron una vieja devoción del barrio a la Virgen del Amparo, que aún se encuentra allí, quizás olvidada en la memoria de la ciudad en el barrio, por un callejón que sale de Cardenal González,  y que mejor que recuperar para el movimiento devocional cordobés… quizás el frio, Pradas te lo produjo la Virgen para que conociéramos el origen de la gloria de las marchas fúnebres por antonomasia en Andalucía.

lunes, 25 de noviembre de 2013

UN TORBELLINO DEL REALEJO PASÓ POR ANDÚJAR...

Si ya de por si el “IV Foro de Capataces Gran Poder” de la homónima hermandad iliturgitana iba a ser sin duda especial para este que les habla, porque iba a ser su presentador y moderador, ya se encargó el de allí arriba de que fuera tan, tan, tan especial que la verdad me puedo hinchar de darle gracias que aún me seguiría quedando corto. Y es que nada más llegar a la casa hermandad de la corporación de Jueves Santo andujeño sentí las vibraciones de que se estaba fraguando algo grande, con decir que este año por fin no llovió y que nada más llegar encontré aparcamiento cuando otros años me he pegado veinte minutos dando vueltas por este rincón andujareño que se me está haciendo familiar cada mes de junio-julio cuando busco la gloria del Carmen…
Y la casa se encontraba dispuesta para que ocupara una mayor capacidad, quizás la hermandad intuyó que este año pudiese ponerse aquello hasta la bandera, que se puso, pero tampoco estuvimos apretados. Nos recibió su hermano mayor, Pedro A. Garzón Martín, el cual le agradezco su atención durante toda la noche con mi persona, mis acompañantes y amigos demostrando que a las hermandades las engrandecen las personas y los pequeños grandes detalles. Quiero darle también las gracias, porque para mí fue un orgullo y una emoción enorme que se acercaran hasta Andújar, dejando sus quehaceres de la vida, mis capataces del Prendimiento de Linares; David Parra y Antonio Acuña, sin dejarme en definitiva los capataces de mi hermandad, porque hasta allí también apareció Juan Raya, capataz actual del primer paso palio a costaleros en tierras del Santo Reino, el de Ntra. Sra. del Rosario de Linares, la verdad que seguro y me consta que disfrutaron de la charla, donde espero que hayan sacado cosas positivas de estos monstruos de los martillos andaluces, tal como diría mi amigo Cris, lo más grande de Andalucía oriental, la verdad que entre los ponentes y algunos asistentes, se podría decir que estaba allí reunido un gran porcentaje de los grandes maestros en este lado de Andalucía.
La verdad que el nerviosismo que se apoderó de mí en casi toda la jornada, se diluyó en cuanto a mí alrededor olía al perfume de la arpillera, algunos compañeros bajo la Virgen del Carmen y en las paredes la tierna mirada del Hijo de Dios parecía que me sosegaba. Llegaron las verdaderas estrellas del evento, volviendo a departir con los cordobeses. Federico, que le encantó mi corbata verde “Huerto” y con Curro al que pude darle el saludo que me quedé con las ganas de darle en Sevilla en la procesión de la Reina de Todos los Santos. En el otro lado llegaba el cicerone y un exultante de felicidad Rafael Mondéjar, que no vean ustedes la cara que tenía cuando acabó el foro, sin duda saboreó las mieles de lo bien hecho y de la gracia del de allí arriba que sin duda quiso en aquella tarde-noche aliarse con él para que todo saliera como salió. Me gustaría destacar el recibimiento que me dio el alma artística de esta hermandad, el bordador, diseñador y si no me equivoco costalero del Gran Poder, Pedro Palenciano, porque me quiso destacar mi desinteresado trabajo en esta casa y me destacó algo de la misma que me llenó de satisfacción, por que vi que en alguien que vive de la estética de las cofradías, estética que debe de llegar la sentimiento, destacó que en esta casa había mucho sentimiento… y es que sin el mismo, la Semana Santa seria pasear hierros y maderas para arriba y para abajo.
Después pude estrechar la mano de Pepe Carvajal, un hombre veterano que era para mí el gran enigma de la noche y qué podría ofrecer… en ese apretón, ya pudimos intuir lo que estaba por llegar. No puedo olvidarme del abrazo a uno de sus hombres y amigos, visitante de esta casa, por lo cual lo he conocido y que sin duda es un lujo que este humilde blog sea visitado por mentes como la suya, fue un placer darle un abrazo a David Rodríguez  Jiménez Muriel, con el cual estoy deseando volver a su embrujadora ciudad y que me enseñe sus mundo cofradiero como más gusta, con gente que habla tu “mismo idioma” y es que la verdad últimamente me estoy sorprendiendo de la gente que verdaderamente sabe de esto y que entran aquí, y no dudan en darme las gracias, ciertamente esos son los detalles que me siguen haciendo que me siente frente al teclado… ya mismo se cumplirá cuatro años de esas dos palabras que incluso se están convirtiendo en un símbolo para mi Simplemente Capillita, y como muestra un botón, que alguien me felicitó por el desarrollo del foro repitiéndome adjetivos favorables o positivos siempre con la palabra “Simplemente” delante.
Encima este año se monta hasta un pequeño escenario, al cual, antes de subir, estando como si fuéramos un equipo en el pasillo de vestuarios, me dispuse al mirar el plantel y le comenté a Federico que ¿pero qué hago yo aquí? Pero subimos y comenzó todo, con una presentación que a Dios gracias podrán ver, ya que yo opté por no grabarlo y no tener que encargar a nadie que estuviese con una cámara en vilo durante casi dos horas y media, porque el evento sobrepasó las doce de la noche. Pero ahí que estuvo el amigo y también compañero bajo las trabajaderas, componente de la banda de mis amores, el Rosario de Linares, Don Salvador Porcel con su equipo para grabarlo y dejarnos el grato sabor en lo inolvidable en la boca, muchas gracias Salva.
Todo comenzó con una medida presentación –y así me la destacó Antonio Acuña, y habrá que hacerle caso, y destaco su opinión porque él es de los que cuando me ve entrada con muchas letras rápidamente se cansa- en nombre de la hermandad y una breve presentación de mi persona, porque entendí que al no ser este que suscribe alguien de la hermandad, tendría que dar explicaciones o más bien las gracias por hacerme participe de un cartel de gran altura, y casi sin saberlo, testigo de excepción de una día, que sin duda tuvo que ser memorable, porque no son solo mis sensaciones, eran la de todos los asistentes, muchos venidos desde Linares, Jaén, La Carolina, Córdoba o Granada. Si quisiera destacar que me hubiese gustado ver algunas personas que asistieron a los anteriores foros, gente que en los mismos aportó mucho juego a las charlas, porque estas cosas son para disfrutarlas sin en verdad amas a las cofradías en toda su magnitud, no ir porque va tu gente, más cuando ahí siempre se le ha dado al césar lo que es del césar, o si no que se lo pregunten a mi amigo Diego Reche, cuando escuchó que la Auxiliadora de Linares la sacó Andrés Caparros en sus añoradas salidas a costal, cuando en realidad, y tal como destaqué, fueron gente del Nazareno, siendo él uno de los hombres de negro.
Tras la presentación se desplegaba un rato donde sin duda se hablaría de muchos temas, o por los menos los llevé, y la verdad pocos se quedaron en el tintero, pero la cierto es que pocas veces fueron las que realicé preguntas y si he de ponerle un pero al foro fue la casi nula participación del público, solo un muchacho que por lo que intuí no era granadino pero si costalero de algunos pasos de la ciudad de la Alhambra, porque quizás fue Granada, bueno quizás no, con total seguridad que Granada nos trajo a un torbellino, llamado José Carvajal Gálvez o Pepe Carvajal, sin duda el nombre más mediático de los martillos granadinos. El desglose de vivencias, conocimientos y opiniones nos presentó a un hombre que sin duda es un genio del mundo de abajo en este costero de Andalucía, pero además es que mostró una forma de ser que se metió en el bolsillo a todos los presentes desde el minuto cero, que aunque dejó hablar algo a los demás ponentes, ellos mismos coincidieron que había merecido la pena dejarlo tan cómodamente sacar todo su genio a relucir. Fue infinidad las ocasiones en las que hizo levantarse en carcajadas a todos, incluso hablando de las cosas malas y feas que también tiene este mundo nuestro de la cofradías, destacar según él, la única razón que existe que es capaz de quitarle a un costalero el veneno de la gracia, razón que pudo decir porque había pocas mujeres presentes en la sala… y ya estaba todo dicho… la verdad que visualicen los videos porque merece mucho la pena. Que lo mismo nos contuvo el pellizco en la garganta, cuando se emocionó al tener que volver a pasar las páginas de su vida por su cabeza los sinsabores de una vida entregada para mayor gloria de las cofradías de la tierra que lo vio nacer, crecer… la cual tan solo ha hecho crecer y mejorar gracias a su aportación con el mundo de abajo para que hoy vengan los “politiqueos” de las cofradías y rompa un eslabón, que sin duda se ha ganado merecidamente.
Fue el tema de las sagas, coincidieron en que la figura del capataz general es lo más beneficioso para una cofradía con más de un paso. Como dije, sin preguntar, porque con antelación todos los ponentes pudieron ver la esencia que la hermandad me permitió plantar sobre la mesa –total libertad por cierto-, y Pepe engarzaba y engarzaba sin parar, como las bandas con la marchas, pero tuvieron también su momento Federico y Curro, y como no, Mondéjar, cada uno extrapolando los temas a sus vivencias y experiencias en sus entornos, siempre presente en estas charlas por estas tierras, los problemas y tácticas para formar las cuadrillas más perfectas. Se tocó un poco el tema de priostía para la mejor marcha del costalero y el movimiento de los palios, donde no quise obviar el caso concreto del palio de la hermandad del Cister de Córdoba, al cual sin duda, Curro le dio un estilo tan personal, que creó algo nuevo y por cosa de las cofrades se perdió, y de esto puede que les hable en otra ocasión, de lo que hizo en ese palio y lo que tuvo que aguantar quizás… pero nos quedaremos con lo bueno.
Quise haber tratado en profundidad el mundo del costal en relación al mundo de las hermandades letíficas pero solo nos pudimos quedar en la detallada historia que nos relató Pepe Carvajal de la cuadrilla del Corpus Christi de Granada, tarea que no tuvo que ser nada fácil, ante paso tan mediático para todo granadino y aunque ya estaba intentando finalizar la gran noche, aun nos dejó algunos detalles de sus vivencias junto a su maestro, en del otro lado de Andalucía, Manolo Santiago –aunque llegó a sacar pasos con Salvador Dorado “El Penitente”-, el cual le llevó a la entonces Agrupación Musical Jesús Despojado –actual Virgen de los Reyes de Sevilla- “un camión de músicos” y gratis al granadinísimo Campo del Príncipe, germen de la implantación de las bandas sevillanizadas en los cortejos granadinos, sin olvidar mencionar, muy brevemente las grandes cualidades que atesora Curro y Fede con el mundo de la música, habiendo sido descubridores de grandes bandas afamadas en nuestros días como Pasión de Linares, algo que aunque ya no le dio tiempo, también ha destacado Mondejar en la búsqueda de bandas tanto para hermandades que ha mandado como las que le han pedido asesoramiento… y es que a Rafa, Pepe Carvajal lo definió perfectamente con el sabor del sencillo… “Tú eres un multiusos…”
Una fotografía enorme para el recuerdo, compartiendo plantel junto a estos monstruos de la costalería “sevillana” pero fuera de la vieja Híspalis, que la verdad estoy pensando en enmarcar como el mejor recuerdo que me pude llevar de esta experiencia, un premio más que considero me deja el Señor en mi vida. Es curioso, Carvajal contó una anécdota de un muchacho que a ultísima hora pudo entrar un año en la cuadrilla del Corpus y le dijo que allí arriba tenía que tener a alguien que tuvo que trabajarse bien al “jefe”, al Eterno para que Él moviera los hilos y este costalero pudiera sacarlo en el misterio del pan y el vino por las calles de Granada, en definitiva por las calles de nuestra Andalucía, sin vacilación compartí la opinión de este veterano capataz, sin duda que allí arriba tengo a alguien que sigue moviendo los hilos para que sienta satisfacciones y orgullos como el del pasado viernes. Rafa y Pedro, el hermano mayor del Gran Poder  me despidieron diciéndome que había sido un honor que hubiese participado, pero la única verdad es que el honor y el privilegiado fui yo, este simple punto en las bullas que rodean a los pasos en la bendita Semana de Dios… y que mejor despedida que con un adiós señores y “siempre de frente…”

viernes, 22 de noviembre de 2013

HOY IV FORO DE CAPATACES GRAN PODER EN ANDÚJAR.

Pensando que fotografía podría ilustrar los sentimientos que se arremolinan en mi alma en este día, he pensado que la que les abre la entrada era la idónea, seguro que habrá cientos o miles más bellas y más actuales que reflejen la gran realidad en torno a esta imagen de Nazareno. Pero hoy es un día especial, quien me lo iba a decir hace casi veinte años cuando contemple por primera vez esta foto, cuando conocí que existía esta imagen y su cofradía…
Esta noche toca una nueva experiencia en mi vida cofradiera que me llena de satisfacción y a la vez de un cierto temor, creo que lógico ante algo nuevo para mí, para que todo salga que mínimo que dignamente, pero que sería si uno no estuviese siempre nervioso, tal como diría los capataces, seria cuando estrellaríamos los pasos por todos los balcones. Esta noche si el Dios, ese que posee la cara de patentes grafismos del maestro Illanes, el que tiene el poder y la gloria en sus manos, si el Gran Poder de Andújar lo quiere, colgaré en la hipotética pared de los recuerdos una nueva alegría en el corriculum de la vida, de esta vida cofradiera que es la que siempre he sentido y me sustenta.
Ya que esta ventana es una gran culpable para que me sucedan estas cosas buenas, para contrarrestar las malas y dañinas, la que terminó de convencer sobre mis hipotéticas cualidades a Rafa Mondéjar, creo que exageradas -pero no te preocupes que si todo marcha bien intentaré sacar todo el potencial que pueda atesorar-, me gustaría desde aquí y antes de que marche para la vieja Iliturgi, mis más profundo agradecimiento a la Hermandad y Cofradía de Nazarenos de Ntro. Padre Jesús del Gran Poder y Ntra. Sra. del Socorro, con su recién aprobado por sus hermanos, nuevo título aun rezumante a estreno, con el sueño de devolver una devoción gloriosa que se perdió en la noche de los tiempos, una Madre Bendita que socorrerá a su Hijo que carga con los pecados del mundo, pero que a su vez lo hará con la paz de la gracia y la gloria, porque ella será una Madre gloriosa para su Hijo en los tormentos de la Pasión, pero como pasión penitencial que corre por las venas, Ella, si así lo ve conveniente dibujará una esencia poco extendida no solo en nuestra provincia, sino en Andalucía.
Mi más profundo agradecimiento por confiar en mi persona, que no está unido al movimiento cofradiero o más bien semana santero de Andújar, por lo que aún le da más valor en mi corazón esta designación, porque no soy el que está allí todos los días y se le puede echar mano, sino que soy ajeno, conozco a la hermandad desde la acera, como a tantas y tantas como muestro en el blog, tan solo mi vinculación con Rafael que es incluso anterior a la llegada del mismo al martillo de “los creen sin ver”. Una designación que en un principio me sobrepasó, pero como decir que no a Rafa, a esta hermandad, a este momento, junto a estos maestros, como decirle que no al Gran Poder, que seguramente ha sido Él, el que me ha querido colmar de esta felicidad, que espero, que esta noche cuando haya acabado todo, piense que ha merecido la pena... en sus manos me pongo, y si abraza con esa dulzura una cruz, que hará con los que lo quieren…
Muchas gracias hermandad del Gran Poder y muchas gracias don Rafael Mondéjar Expósito, espero que el Simplemente Capillita os colme vuestras expectativas, y podamos aprender todos de la experiencia, y como anticipo de temas como la costalería en Andalucía, sobre todo Córdoba, Granada y Jaén, sin olvidarnos de la escuela de este campo, Sevilla. Las igualás, la afición, las sagas, los estilos o la figura costalera en el mundo de las glorias… pero sobre todo ahondar en donde puede estar el secreto para que una cuadrilla se convierta en un grupo grande y de categoría en una cofradía. Allá donde está Rafa, Federico, Curro y Pepe Carvajal hay categoría, costaleros de sobra y mucha esencia… nos tendrán que explicar como se hace…
Nos vemos esta noche, en la acogedora casa de los hermanos del que hace años escuché que llamaban en Andújar, “el Cachorro”, no sé si seguirá patente, pero en definitiva estaremos bajo el aura de Jesús del Gran Poder, y eso es casi razón segura de que todo marchará bien.

miércoles, 20 de noviembre de 2013

...Y ENCONTRAMOS EL AMPARO. (II)

Tengo algo muy claro, soy Simplemente Capillita, lo que conlleva que me gusta el arte, la música, la costalería, pero también disfruto como un “cochino” con toda la esencia de las cofradías. En la mañana quise quitarme el otro plato del día para disfrutar de toda la tarde junto al Amparo de la Virgen y todas estas grandes personas que Ella me ha querido dar a conocer. Pero no pudo ser y la verdad me costaba dejar toda la magia que estaba sintiendo, pero quien se dejaba en el tintero la agenda cofradiera, sobre todo de besar la bendita mano de la Virgen. Además el amigo Olmedo, ayudó a que cogiéramos un atajo, al final también voy a saber andar por Córdoba y buscase nuevamente los besamanos de las cofradías del Remedio de Ánimas, Buen Suceso y Expiración, que al fin y al cabo son nuevas oportunidades de aprender, que como capillita de todo me gusta empaparme. Pero además contábamos con un plato fuerte, más por la cercanía, en el antiguo hospital o capilla de la añeja cofradía de Jesús Nazareno se encontraba la bella y coronada Virgen del Carmen de San Cayetano en rosario vespertino. Aunque yo la conocí precisamente el día de su coronación, mis amigos querían también conocerla, además de conocer los titulares de están antigua cofradia. Hubo suerte, cuando al llegar a su también recoleta plazuela pudimos entrar, mientras el amigo Pradas se extasiaba de la belleza de la gloriosa Virgen, a él que tanto le atrapa esta característica del arte y veneración mariana, aunque a mí me atrapara más mi pasión por la belleza artística de una Madre rota de dolor como es la que llaman en Córdoba la “Nazarena”, auténtica joya del arte y la unción sagrada, sin duda que contemplarla sobre su especial paso de palio tiene que ser un éxtasis para los amantes de otras formas… Ella que también está guardada en la apretada agenda de este capillita con todos ustedes… sin olvidarnos de la imagen de su hijo, envuelto en las esencias artísticas de los primeros tiempos de la pasión cordobesa.











En andas, vistiendo su más común atuendo carmelita de manto u capa blanca, se marchó para San Cayetano la Virgen del Monte Carmelo, mientras Fray Juan Dobado alzaba a la noche los rezos, en este día tan especial para su advocación como rescatadora de almas en el purgatorio que es, mientras nosotros buscábamos algo tan tétrico, que casi nos parecía eso mismo, un purgatorio. Y es que por San Lorenzo se alzaba los altares de lo luctuoso según Córdoba. El Remedio de Ánimas estaba de cultos y para ello su espíritu sobrio emergía pero de otra manera quizás a lo que puede ser su cofradía en la calle… la suntuosidad barroca, teñida de negro alzaba a su crucificado en el altar mayor y en la capilla el montaje aun le ganaba la partida al del año anterior, donde la belleza de rasgos granadinos de la dolorosa de las Tristezas te cortaba la respiración con su dolor enmarcado entre el rostrillo de metales nobles que casi se podía sentir su tensión contenida al besar sus entrelazadas manos. Sinceramente me quito el sombrero con esta hermandad para sus cultos, solo faltó estar solos, con la iglesia vacía, casi apagada a la luz de la cera y tener ese cara a cara mientras sonase los tenebrosos canticos gregorianos. Visita cortes al Señor de los Reyes y su cofradía, explicación a mis acompañantes de quien era la Virgen de gloria de la Victoria. En la otra nave la también ancestral hermandad de “La Vía Sacra” nos invitaba a buscar en la red la gran marcha que le han dedicado a esta hoy más conocida como hermandad del Calvario, aunque su Cristo sea un Nazareno, y que Federico –capataz de su paso palio- en la mañana nos aconsejó que escuchásemos, en el concierto que Tejera había dado días antes en San Lorenzo y donde nuevamente volvió a sentar la bases de cómo se ha de interpretar las marchas… marcha que luego en Sevilla me traería una anécdota con el mismísimo director de la banda del Maestreo Tejera.


























Al final fuimos a San Andrés, que estaba cerrando, pero el hombre fue tan amable que nos dejó unos momentos entrar, aunque a mis acompañantes se les olvídese que había que ser más breves, no sabían que la Virgen de la Caridad ya le había hecho pensar a aquel hermano, que como no nos iba a dejar besarle un año más la mano. Pradas me preguntaba de qué hermandad era, la de curioso misterio del Buen Suceso que nos miraba en la capilla y en frente la populosa hermandad de la Esperanza sorprendía a Guerrero por el tamaño del “Manué” de Córdoba. Como se me cabrea el Pedro de ver que sencillamente también se puede hacer cosas preciosas, pero solo hay que tener el gusto y las ganas… refunfuñando me lo iba comentando dirección a San Pablo donde nos esperaba la belleza desmesurada de la Virgen del Rosario, y también una imagen que mi amigo con apellido de soldado de todos los tiempos y las culturas quería conocer, la soberbia imagen o imágenes de las Angustias de Juan de Mesa. Busqué donde el año pasado pero allí no había besamanos, me desconcertó, mientras el cura que estaba en los confesionarios nos regañaba porque en misa nos acercábamos a la capilla, con todo el respeto del mundo pero este por las arrugas de la cara se veía de otros tiempos y modos. Al final encontramos a la Virgen del Rosario, en un sencillo pero elegante montaje, junto a su Hijo expirante en la cruz y la dolorosa que lo acompaña en su calvario errante del Viernes Santo… Pradas como no podría ser de otra manera, apasionado de los “Duartes” salió embelesado y diciéndonos que todo estaba siendo maravilloso, pero que la Virgen del Rosario Coronada había sido lo mejor de la jornada, la cual  siguió en busca del final del Amparo de María por las calles de Córdoba…


CONTINUARÁ…