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sábado, 24 de diciembre de 2011

EL DIA EN QUE DIOS NACIÓ...

Quisiera acordarme en esta noche, en este mismo momento de todas aquellas personas que por su circunstancia laboral están olvidándose de la eterna tradición familiar de la comida de noche buena. Aquellas personas que velan en los hospitales de los enfermos y de aquellos que por alguna urgencia necesitan del socorro de estos profesionales los cuales dedican su vida laboral a casi un mandamiento de nuestro Señor, ayudar al desvalido. Ahora si que se lo digo a mi amigo Félix, que su nomina y de todos aquellos compañeros suyos de profesión es algo mas que un papel donde se refleja los datos que le dan de comer. Cuantas veces en nuestras coñas me dice que nunca necesite una ayuda de un enfermero o un medico para tanto criticarlos.
Hoy a querido el Soberano, el Gran Poder o el Mostrenco… pónganle la cara que quieran… ese niño que nace hoy darme un toque de nuevo, no se, o eso pienso yo…será por que desde hace años odio la hipocresía establecida en la que en una noche al año todos somos muy buenos. Supongo que Él se conformará con por lo menos un día de los 365, que el mundo saque su humanidad… supongo que lo abra echo por eso, por este motivo le deseo a todos ustedes una feliz navidad, miren al tierno niño que nació entre las mas onda pobreza y no se si lo comprenderán, si pensarán que soy un friki, pero piensen que pocos nacieron para morir por nosotros… este indigno hombre, insignificante punto en el universo sigue sintiendo que sus enseñanzas, aunque sigamos cayendo en las eternas zancadillas, son las que marcan su vida y las que les da las satisfacciones de sentirse un hombre bueno, aunque eso solo lo puede valorar un bebé que nace hoy.

1 comentario:

  1. Feliz Paso del Niño Dios entre nosotros, amigo mío. Este día siempre nos recuerda las palabras con las que nos educaron, los gestos con los que nos demostraron que éramos importantes para los nuestros, las ausencias de quienes más añoramos. ¡Y son poco más de 100 días para que la vida vuelva a renacer, como nos recuerda Javier en sus "Cirios y troyanos".
    ¡Benditas Vísperas cofrades de la Navidad!

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