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sábado, 20 de julio de 2013

...DE MAESTRO A MAESTRO.


En una noche de fiesta como la de ayer, con los amigos, entre ellos mi compañero bajo las trabajaderas Félix Gómez, recordábamos que la noche en la que nos introducíamos no era una noche como otra… ya son siete años, y tal cantidad de vueltas al sol dan como para sentirlo con la templanza que nos pedía el otro día Mondéjar, como nos pide Parrita y como mi amigo tuvo el privilegio de vivir hasta hace siete años, como se lo mandaba su maestro, mi maestro, el Capataz del Soberano…
Es curioso, hace once años llegaba a una hermandad donde la verdad disfrutaba mucho, se respiraba tal verdad, tan pura y tan sana que nunca daban ganas de marcharse de la mítica casa-hermandad de la calle Carolina. Y estoy seguro que en gran medida se daba por su jerarquía, a su control no autoritario pero que en si transmitía una seguridad a todos los que querían vivir la hermandad en aquellas fechas, quizás poco fácil de superar… cierto día, David Parra me dijo, que un gran hermano mayor debe de ser alguien que pueda dominar todas facetas de los que es una hermandad y cofradía… ¿cómo Andrés verdad? Le contesté yo… y es que no le quepa la duda a nadie, que Andrés sabia de cofradías…
Es curioso como en esos años, para darle algo así como envidia sana al amigo Ripoll, le rememoraba que en aquel Lunes Santo de 2002, se dibujaba una estampa ante sus ojos llena de sabor, su otro Soberano, el del barrio León, caminando por Triana al compás de “Costalero del Soberano”, visualizando fuera del paso al legendario que con todo merecimiento recibe la dedicatoria de la gran marcha de Pedro Pacheco, Bienvenido Puelles Oliver, indicando algunas órdenes a los de dentro desde fuera… la experiencia de ser casi el creador de lo que tantos se extasiaban contemplando…
Eran las marchas o las creadas a partir de sus nuevos postulados su favoritas, el también entendía de la trascendencia de Puelles, y en cierto modo al referirse al él, lo hacía como quien habla de las grandes personalidades de la vida… es curioso, once años después ya saben mi humilde trascendencia con Bienvenido Puelles, que hace ya casi un mes, en la calle Larios de Málaga, conversando durante el rato que lo hicimos, pues sin meditarlo salió a la palestra un poco de mi vida junto a la hermandad del Prendimiento de Linares –es que hablarle a alguien de la historia reciente de la hermandad es inevitable no mentarte-,donde sin duda muchos amamos a San Gonzalo gracias a la aportación de quien hace siete años por hoy ya tenía un pitote grande, algarabía y fiesta de los que iban a disfrutar para siempre de su presencia.
Que mejor homenaje, a los que quizás creo que lo esperan, que contarles la cara de sorpresa y satisfacción de Bienvenido Puelles cuando le contaba que gracias a ti, cada Lunes Santo, desde la salida hasta la Estrella se pueden meter detrás de su cristo más de treinta “prendios” del Prendimiento de Linares, que aquel video del 2002 es casi como una reliquia para muchos de nosotros, que aquí en Linares le levantaron un merecido homenaje a Garduño y que la esencia que Puelles junto a Juan Vizcaya crearon es la misma que discurren por nuestras venas… le pregunté cual era el secreto para que una hermandad como San Gonzalo sacase dos mil nazarenos…. “Y dos mil trescientos se han llegado también” me espetó… “pues por la cuadrilla del misterio”…  la estética y el arte a disposición de la fe, un izquierdo por delante para acercarte a Dios… sin duda que esto hace que merezca la pena.

Haciendo un símil, ¿qué grandeza pasea hoy la hermandad del Prendimiento por Linares?… sin duda su cuadrilla del misterio, siguiendo una misma esencia, una misma verdad, con todas las consecuencias, ahí está el resultado como te diría tu Acuña, Capitán… porque las cosas nunca las hago buscando una compensación, las cosas y la verdad cae por su propio peso, sin duda ayer lo removí en mi alma, y sentí que tuve el privilegio de contarle a Bienvenido Puelles quien era don Andrés Caparros. Y para ti va la poderosa carrera oficial de este año…

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