Esta fotografía que ven pertenece al Corpus de Triana con la curiosidad de ver al joven capataz, aun con pantalones cortos. Quizás meto la pata pero donde he encontrado esta fotografía dicen que ese chaval o casi niño es D. Rafael Ariza, capataz de Sevilla y desde el pasado día 1 de octubre de los cielos cuando fue llamado por “Él Jorobaito” Eterno ante su presencia en la calle Castilla de la Gloria.
Quizás este documento grafico nos puede dar una idea de la historia de la familia Ariza delante de los pasos sevillanos, una historia que comenzara Rafael Ariza Aguirre “Ariza el viejo”, continuada por su hijo, José Ariza Mancera y seguida con gran esplendor por sus hijos Rafael Ariza Sánchez –el joven capataz de la fotografía- y José “Pepe” Ariza Sánchez. Rafael que ya goza de la presencia de su Madre Santísima de la O y Pepe retirado recientemente han dejado su legado en la mano de sus hijos Antonio “Toni”, Ramón, Pedro y Rafael. Un legado que pasa por la casi totalidad de los martillos de Sevilla siendo acrecentada su fama por ser los capataces de su hermandad la O de Triana además de la Hiniesta, la Soledad de San Lorenzo y recientemente de San Esteban en la actualidad.
Capataces de ideas antiguas, de pasos de andar clásico de frente y sin cambios siendo quizás los pasos de su hermandad de la O los que más se adapten a su estilo, el paso del Nazareno chiquitito pero con presencia se come las calles de Sevilla, el palio de los “gordos” que sus levantas son de otro mundo y por ello quiero mostrar dos videos que quizás dicen mucho.
Dos videos en Campana, en la levantá ante el palquillo donde normalmente los capataces hacen una dedicatoria especial. El primero es de 2008, Pepe Ariza va a llamar y un costalero le interrumpe: “Para que los costaleros sean costaleros y los capataces sean como ustedes, ¡capataces!”, lo que traducido sería algo así como en el paso manda el capataz y en el capataz la junta de la hermandad. Esto venia ante algunos casos aun actuales en los que algunos capataces y sus cuadrillas actúan con medidas de presión a las hermandades para conseguir sus intereses.
En el siguiente video nuevamente el singular Nazareno de la calle Castilla hundido por el Sagrado Madero de Carey se planta ante el palquillo de la Campana en 2009. La llamá la hace Antonio, hijo de Pepe Ariza que contempla la maniobra común sin esperar que su hijo se la va a dedicar a el por sus cincuenta años guiando a los hombres que pasean a Dios y su Madre Bendita por Sevilla. El “maestro” con tan solo intuir a quien se refiere su hijo, se da media vuelta por la emoción para quitarse de en medio, cincuenta años mandando pasos y sin buscar protagonismo. Así se escribe la historia de los grandes, aquel año tras pasear a la dolorosa más antigua de la ciudad y posarla en San Lorenzo anunció su retirada dejando una estela importante y que con la marcha de su hermano Rafael al Reino de Dios donde ya estará charlando de cofradías y costaleros con los míticos capataces de Sevilla, se cerró una historia de la vieja ciudad de los últimos capataces que nacieron con los profesionales y continuaron con ellos pero tan solo sin cobrar nada a cambio….aunque se les llame “hermanos Costaleros”.
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